La situación de las inundaciones se ha deteriorado en Malí en los últimos 10 días, según la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCAH).
Las inundaciones comenzaron en el país en julio, afectando a unas 7.000 personas. Según la OCAH, al 6 de agosto, más de 13.200 personas, entre ellas 5.400 desplazados internos, se vieron afectadas por las inundaciones en el país. Las regiones más afectadas son Gao, Mopti, Ségou y Sikasso. Un total de 1.160 viviendas han sido destruidas.
La OCAH dijo que, en apoyo de los esfuerzos del Gobierno, los asociados humanitarios ya han proporcionado a las personas afectadas alimentos, artículos no alimentarios y refugio. Sin embargo, las existencias de socorro movilizadas actualmente siguen siendo insuficientes, habida cuenta del aumento de las necesidades humanitarias de las personas afectadas por las inundaciones. Este año, 112.400 personas corren el riesgo de sufrir inundaciones según el plan nacional de contingencia.