Una empresa noruega afirma haber descubierto una forma de mitigar el aumento de los huracanes destructivos: soplando burbujas.
OceanTherm, fundada por Olav Hollingsæter, antiguo oficial de la marina, está desarrollando un sistema que utiliza burbujas para enfriar la temperatura de la superficie del mar extrayendo agua fría de las profundidades de los océanos.
Los huracanes se crean cuando el aire caliente y el frío se encuentran sobre aguas oceánicas cálidas de 26,5°C o más.
Cuanto más caliente sea el agua, más potente puede ser un huracán, como se ha visto en los recientes y devastadores ciclones de años pasados.
Pero el agua por debajo de los 26,5°C no tiene ni el calor ni los niveles de evaporación suficientes para alimentar un huracán.
Esto reducirá la fuerza de la tormenta -y las posibilidades de tocar tierra o impedirá que se forme.
La idea de OceanTherm es bajar a las profundidades del océano unos tubos perforados a través de los cuales se sopla aire comprimido.
El aire crearía burbujas que atraerían el agua más fría hacia la superficie y reducirían su temperatura por debajo de los 26,5ºC.
Las tuberías se depositarían desde una flota de barcos que patrullan zonas conocidas por la formación de huracanes, lugares como el Golfo de México.
Así, crearían una «cortina de burbujas» en la trayectoria de un huracán para disminuirlo, pudiendo «detenerlos en su camino», según la revista BBC Science Focus.