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Según el South China Morning Post, el caimán gar ha sido visto en al menos ocho provincias chinas, entre ellas Henan, Guangxi, Ningxia, Qinghai, Shandong y la capital, Pekín.
Esto ha hecho temer un desastre ecológico, ya que la especie exótica invasora podría perjudicar a los residentes locales y al medio ambiente, que tiene pocos depredadores naturales.
Tras un mes de caza, las autoridades de Ruzhou, ciudad de la provincia china de Henan, capturaron por fin el fin de semana una pareja de la especie invasora tras drenar todo un lago de 200.000 metros cúbicos.
En julio, un vídeo del «pez monstruo» captado por un residente local provocó un revuelo en la ciudad que llevó a una operación de búsqueda de un mes en el lago.
Después de que grandes redes de pesca y un localizador por sonar no consiguieran capturar a los dos caimanes, a los trabajadores municipales no les quedó más remedio que vaciar todo el lago.
El sábado, los machos y hembras de caimán capturados, que medían 70 y 90 centímetros respectivamente, recibieron un «tratamiento inofensivo» por parte de las autoridades del lago de Ruzhou.