( Imagen de portada referencial )
Los planes de Suiza de construir un almacén de residuos nucleares en una zona adyacente a Alemania han hecho temer a las comunidades del otro lado de la frontera por su salud, según informan los medios de comunicación.
El sábado, la Cooperativa Nacional para la Eliminación de Residuos Radiactivos (Nagra) de Suiza propuso la zona de Nordlich Laegern como ubicación del futuro depósito subterráneo de residuos radiactivos. En un tuit, Nagra argumentó que el lugar era la opción más segura debido a su geología. La cooperativa presentará sus razones para elegir la zona con más detalle durante una conferencia de prensa el lunes en Berna, decía el mensaje.
Si las autoridades y los ciudadanos suizos lo aprueban, los residuos radiactivos de las cinco centrales nucleares del país, así como de las instalaciones médicas e industriales, se enterrarían a varios cientos de metros bajo tierra. Según la página web de Nagra, «el tiempo de confinamiento necesario es de unos 200.000 años para los residuos de alta actividad y de unos 30.000 años para los de baja y media actividad».
Sin embargo, las comunidades fronterizas de la región alemana de Baden-Wuerttemberg se muestran escépticas ante las garantías ofrecidas por Suiza y temen quedarse sin suministro de agua potable. Según Christian Kühn, diputado alemán por Baden-Wuerttemberg, la proximidad de la instalación de almacenamiento prevista al pueblo de Hohentengen plantearía un «problema tanto durante la fase de construcción como durante el funcionamiento del depósito», informa Deutsche Welle.
El Ministerio Federal de Medio Ambiente de Alemania también ha criticado los planes de Nagra.
Un grupo de activistas afirma que Nagra debe explicar al público por qué rechazó el emplazamiento en el pasado y por qué cambió de opinión recientemente.
A pesar de la alarma, el proceso de aprobación podría durar décadas, según los medios de comunicación alemanes. Nagra pretende presentar una solicitud de planificación antes de 2024. Después, el gobierno suizo tendría que tomar una decisión, en ese momento le tocaría al parlamento emitir sus veredictos y, finalmente, la cuestión se sometería a referéndum.
Existen dos emplazamientos alternativos para un depósito subterráneo de residuos nucleares, que también se encuentran cerca de la frontera alemana.