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Un bombardero estratégico de largo alcance B-1B Lancer de EE.UU. ha sido trasladado a la península de Corea para participar en un simulacro conjunto de EE.UU. y Corea del Sur, informó el sábado el ejército de Seúl, citado por los medios locales. El anuncio se produjo un día después de que Corea del Norte realizara su última prueba de misiles balísticos intercontinentales (ICBM).
«Corea del Sur y EE.UU. realizaron hoy un simulacro aéreo conjunto con el bombardero estratégico B-1B de la Fuerza Aérea de EE.UU. redesplegado en la Península de Corea», dijo el Estado Mayor Conjunto (JCS) del Sur en un comunicado.
Los militares indicaron que el bombardero supersónico estadounidense sobrevoló la zona de identificación de defensa aérea del Sur y fue escoltado por aviones F-35A surcoreanos y cazas F-16 estadounidenses.
«A través de este simulacro, hemos demostrado una vez más la capacidad militar conjunta de la alianza entre Corea del Sur y EE.UU. y el compromiso de Washington de proteger la península de Corea y proporcionar una disuasión ampliada», dijo el JCS.
