Los aviones se han quedado en tierra en la isla de La Palma, en las Islas Canarias españolas, debido a una nueva erupción volcánica, en la primera cancelación de vuelos desde que el volcán Cumbre Vieja cobró vida esta semana.
El viernes también se ordenaron nuevas evacuaciones al registrarse grandes explosiones y nuevas aperturas en el volcán, que arrojó una gran nube de ceniza negra y espesa al aire.
Había siete vuelos programados para el viernes operados por Binter, Canaryfly y la aerolínea nacional, Iberia, pero todos fueron desechados.
«Todavía no es posible decir cuándo podremos reanudar los vuelos», dijo la compañía española Binter en Twitter.
Nicolas Haque, de Al Jazeera, informando desde La Palma, describió la escena como «un gigantesco caldero humeante».
«Nadie sabe qué escenario viene a continuación… La nube de ceniza se dispara, cancelando todos los vuelos en la zona… Cuando el segundo cráter entró en erupción, oímos un boom sónico, las ventanas se cerraron, una verdadera sensación de miedo a lo que está por venir», dijo.
Las autoridades también ordenaron nuevas evacuaciones, que se suman a las 6.100 personas que ya se vieron obligadas a abandonar la zona esta semana tras la erupción del domingo.