( Imagen de portada referencial )
Las granjas que crían pavos y pollos para carne y huevos están en alerta máxima y toman medidas para aumentar la bioseguridad, temiendo que se repita un brote generalizado de gripe aviar en 2015 que mató a 50 millones de aves en 15 estados y costó al gobierno federal casi mil millones de dólares. Según publica abcnews
El nuevo temor está impulsado por el descubrimiento, anunciado el 9 de febrero, de que el virus ha infectado a una manada de pavos comerciales en Indiana. Los 29.000 pavos de la manada fueron sacrificados para evitar la propagación del virus.
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