(Imagen de portada El destructor de misiles guiados de la Armada de los EE. UU. USS John S. McCain (FOTO DE ARCHIVO) © REUTERS / Ahmad Masood)
Pekín ha dicho que sigue vigilando las maniobras militares de Estados Unidos cerca de la China continental y de Taiwán, advirtiendo que China está preparada para responder a las amenazas y provocaciones estadounidenses.
El jueves, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Wang Wenbin, dijo a los periodistas que Pekín había seguido atentamente el paso de un buque de guerra estadounidense por el estrecho de Taiwán ese mismo día.
«China seguirá manteniendo un alto nivel de alerta en todo momento, preparada para responder a todas las amenazas y provocaciones en cualquier momento, y defenderá con determinación la soberanía nacional y la integridad territorial», declaró Wang.
«Se espera que Estados Unidos desempeñe un papel constructivo para la paz y la estabilidad regionales, y no al revés».
El jueves, el destructor de misiles guiados USS John S. McCain atravesó atronadoramente el estrecho de Taiwán, el primer viaje de la Armada estadounidense a través de la vía marítima en 2021.
«El tránsito del buque por el Estrecho de Taiwán demuestra el compromiso de Estados Unidos con un Indo-Pacífico libre y abierto», dijo el portavoz de la Séptima Flota, el teniente Joe Keiley, describiendo la navegación como «rutinaria» y «de acuerdo con el derecho internacional.»
Pekín ha instado repetidamente a Washington a respetar el principio de «una sola China» y a no emprender acciones que perjudiquen las relaciones entre China y Estados Unidos, así como la paz y la estabilidad en el estrecho de Taiwán.
Sin embargo, Taiwán mantiene su independencia de China y la nueva administración Biden ha reiterado su compromiso «sólido como una roca» con la defensa de la isla.
Pekín también ha pedido a Estados Unidos que desista de realizar maniobras militares en las aguas en disputa frente a China y en sus alrededores.
Apenas unos días después de la toma de posesión del presidente Joe Biden, un grupo de portaaviones estadounidense liderado por el USS Theodore Roosevelt y tres buques de guerra entraron en el Mar de China Meridional, lo que supone una continuación de los movimientos realizados durante la administración Trump. Los militares estadounidenses dijeron que el movimiento era para promover la «libertad de los mares».
Pekín ha instado a la administración de Biden a entablar un mayor diálogo para reducir las crecientes tensiones entre las naciones superpotentes.