Muchos de los infectados por el virus deciden quedarse en sus hogares, contagiando a las personas que los cuidan.
El Fondo de la ONU para la Infancia, Unicef, advirtió este martes, 30 de julio del 2019, de que 3 de cada 10 pacientes de la epidemia de ébola en el noreste de la República Democrática del Congo (RDC) son niños y alertó de que para paliar la situación de vulnerabilidad de la infancia se necesitan triplicar los recursos disponibles. En concreto, de los 2 671 casos confirmados de ébola en las provincias congoleñas de Kivu del Norte e Ituri, 718 son niños y más de la mitad de estos son menores de 5 años, según informó el especialista en salud de Unicef, Jerome Pfaffman, tras haber estado desplazado en la zona afectada. «Los colegas y las comunidades están luchando contra la epidemia sin descanso, pero necesitamos desesperadamente el apoyo de la comunidad internacional», declaró por teléfono este experto, según transmitió su organización en un comunicado. De acuerdo con este especialista, por ejemplo, el último día que estuvo desplazado en la región noreste -donde el ébola se ha cobrado ya 1 790 vidas, según los últimos datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS)- se registraron 12 nuevos casosa
Esto ha llevado a que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declare la epidemia como emergencia de salud pública internacional. Una designación que la OMS ha reservado en los últimos años pera la gripe A o virus del zika. Y para la devastadora epidemia de ébola de 2014.