Aunque los funcionarios de la ONU dijeron recientemente que la intensidad de la guerra ha disminuido, Yemen todavía se enfrenta a una situación humanitaria muy grave, dijo Robert Mardini, jefe de la delegación del Comité Internacional de la Cruz Roja en la ONU.
«Recientemente hemos estado extremadamente preocupados y preocupados por los informes de brotes de dengue, además del cólera», dijo Mardini a un grupo de periodistas.
Según se informa, más de 3.500 personas han contraído dengue y se cree que en la ciudad de Hodeida 50 han muerto desde finales de octubre hasta principios de noviembre, agregó.
En esa región de Yemen, más de 2.000 personas están infectadas con dengue y cerca de 3.000 sufren de malaria, agregó Mardini.
«Es un gran desafío poder controlar esta epidemia», dijo el funcionario.
El dengue es transmitido principalmente por mosquitos que se reproducen en aguas estancadas.
La guerra civil en Yemen ha dejado decenas de miles de muertos desde que estalló en 2015, la mayoría de ellos civiles, dicen las organizaciones de ayuda.
Ha generado la peor crisis humanitaria del mundo, según las Naciones Unidas.