Las autoridades confirman cuatro nuevos casos del virus, que un centro de investigación londinense estima que ha infectado hasta 1.723 personas.
El número de personas infectadas por un misterioso virus similar al SARS que ha matado a dos personas en China es probable que sea cientos más de lo que se ha informado oficialmente, según los investigadores.
La noticia llega cuando las autoridades sanitarias chinas dijeron el sábado que han descubierto cuatro casos más de neumonía tras un brote de lo que se cree que es una nueva cepa de coronavirus.
A los cuatro individuos se les diagnosticó neumonía el jueves y se encuentran en condición estable, señaló la Comisión de Salud Municipal de Wuhan en una declaración publicada poco después de la medianoche.
La declaración del sábado marcó la primera confirmación de nuevos casos por parte de los funcionarios en casi una semana y se produjo un día después de que la comisión confirmara la muerte de un segundo paciente.
Los coronavirus suelen causar enfermedades de leves a moderadas en las vías respiratorias superiores, como el resfriado común, pero también pueden afectar las vías respiratorias inferiores, causando neumonía o bronquitis.
Las autoridades chinas dijeron que 45 personas en el país habían contraído el virus, y que el brote se centró en un mercado de mariscos en la ciudad central de Wuhan, donde viven 11 millones de personas.
«El gobierno chino ha publicado cifras que indican que hay 45 personas afectadas, alrededor de 100 personas siguen siendo monitoreadas, 600 que originalmente estaban en cuarentena han sido liberados porque no tienen síntomas», dijo Katrina Yu de Al Jazeera, informando desde Beijing.
Sin embargo, un documento publicado el viernes por científicos del Centro de Análisis de Enfermedades Infecciosas Mundiales del Imperial College de Londres dice que es probable que el número de afectados en la ciudad sea considerablemente superior a mil.
Los científicos del centro – que asesora a organismos como la Organización Mundial de la Salud (OMS) – dijeron que estimaban que un «total de 1.723 casos» en Wuhan habrían sido infectados hasta el 12 de enero.
Los investigadores tomaron el número de casos reportados fuera de China hasta ahora – dos en Tailandia y uno en Japón – para calcular cuántas personas fueron probablemente infectadas en Wuhan, basándose en los datos de tráfico de vuelos internacionales del aeropuerto de la ciudad.
Para que Wuhan haya exportado tres casos a otros países, tendría que haber muchos más casos de los que se han reportado», dijo a la BBC el profesor Neil Ferguson, uno de los autores del informe.
«Estoy sustancialmente más preocupado de lo que estaba hace una semana», dijo, añadiendo, sin embargo, que era «demasiado pronto para ser alarmista».
«La gente debería considerar la posibilidad de una transmisión sustancial entre humanos más seriamente de lo que lo ha hecho hasta ahora», añadió, diciendo que era «poco probable» que la exposición animal fuera la principal fuente de infección.
China ha dicho que todos los casos hasta ahora se han limitado a Wuhan. Yu, de Al Jazeera, dijo que al menos ocho personas han sido arrestadas en China por difundir rumores sobre la gravedad del virus.
Análisis en los aeropuertos
Se sabe que dos personas murieron a causa del virus -un patógeno de la misma familia que el mortífero virus del SARS- mientras las autoridades sanitarias de todo el mundo trataban de asegurar al público que el riesgo general de infección seguía siendo bajo.
Las autoridades de Hong Kong han intensificado las medidas de detección, incluyendo rigurosos controles de temperatura para los viajeros que llegan del continente chino.
Estados Unidos dijo que a partir del viernes comenzaría a controlar los vuelos que llegan de Wuhan al aeropuerto de San Francisco y al aeropuerto JFK de Nueva York -ambos reciben vuelos directos-, así como a Los Ángeles, donde hay muchos vuelos que conectan.
Yu, de Al Jazeera, dijo que «no se han implementado formalmente medidas similares» en China, donde el gobierno está instando a los ciudadanos a mantener la calma y a llevar su vida diaria con normalidad, ya que hasta ahora no ha habido evidencia de que la enfermedad se transmita de persona a persona.
Hasta ahora, los funcionarios de salud no consideran que el nuevo virus de China sea tan letal como el SARS, pero la investigación está evolucionando y todavía no se sabe mucho sobre si el virus puede propagarse fácilmente de una persona a otra.
«Esta es la etapa de la investigación en la que debemos proceder con cautela y estar preparados para cualquier eventualidad», dijo la Dra. Nancy Messonnier, experta en enfermedades respiratorias de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.
El SRAS se originó en el sur de China en 2002 e infectó a más de 8.000 personas en 37 países antes de ser controlado.
Casi 800 personas murieron en todo el mundo. China fue acusada de encubrir el brote.
El último brote se produce antes de las vacaciones del Año Nuevo Lunar, cuando muchos de los 1.400 millones de habitantes de China viajarán a sus ciudades de origen o al extranjero.
El gobierno chino espera que los pasajeros hagan 440 millones de viajes por ferrocarril y otros 79 millones de viajes por avión durante las festividades.
