Las rocas espaciales tipo Apolo típicamente zumban alrededor del Sol en órbitas que cruzan la de la Tierra de manera similar a la del asteroide 1862 Apolo y podrían potencialmente desviarse en un curso de colisión con nuestro planeta.
Dos asteroides proyectados para pasar cerca del planeta Tierra hoy 2 de marzo han tenido a la NASA en alerta, con su Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra (CNEOS) rastreando las rocas espaciales desviadas que poseen órbitas que cruzan la trayectoria de la Tierra.
El primer asteroide en aventurarse en las cercanías de la Tierra ha sido apodado 2020 DZ3. Con una órbita que atraviesa los caminos de Mercurio y Venus, según la base de datos del CNEOS, el asteroide ha alcanzado una velocidad de más de 48.000 millas por hora y tiene un diámetro estimado de unos 154 pies (47 metros). Se calcula que la próxima aproximación a la Tierra de este asteroide se producirá el 28 de septiembre de 2022.
El otro viajero espacial va detrás, tanto más pequeño como más lento que el 2020 DZ3.
Etiquetado como 2020 DD4 y siguiendo un camino alargado que va más allá de la órbita de Marte, mide unos 43 pies de ancho y está volando a través del Sistema Solar con una velocidad de alrededor de 24.000 millas por hora ( 38624.256 km). Este visitante espacial volverá de nuevo para acercarse a la Tierra el 11 de febrero de 2033.
Los dos asteroides entran en la categoría de asteroides Apolo, que tienen órbitas naturales que se cruzan en el camino de la Tierra al girar alrededor del Sol.
Teniendo en cuenta los datos mencionados, si la trayectoria de las rocas espaciales se alterara ligeramente, las pondría en curso de colisión directa con la Tierra.
Los cálculos de los expertos muestran que el 2020 DZ3, debido a su tamaño y velocidad, podría potencialmente resultar en un impacto, mientras que el 2020 DD4 muy probablemente se quemaría en la atmósfera.
El primer asteroide de clase Apolo con una órbita que atraviesa la Tierra fue descubierto en 1918 por Max Wolf, observando desde Heidelberg, Alemania.
Se conocen 240 Apolos, pero se cree que hay al menos 2000 cruces de la Tierra con diámetros de 1 km o más, que representan una amenaza muy real, aunque estadísticamente improbable, para la Tierra.
Recientemente ha habido un gran interés en los peligros de que un asteroide que atraviesa la Tierra se estrelle contra ella, a pesar de que la probabilidad de que ocurra es relativamente menor.
Se sugiere que una colisión hace 66 millones de años entre la Tierra y un objeto de un ancho estimado de 10 kilómetros (6 millas) causó el cráter de Chicxulub y el evento de extinción del Cretácico-Paleógeno, que muchos expertos creen que llevó a la extinción de la mayoría de los dinosaurios.