El presidente francés Emmanuel Macron ha impuesto un bloqueo de dos semanas, declarando una «guerra» al «enemigo invisible» del coronavirus y cancelando la segunda vuelta de las elecciones municipales.
Se ha ordenado a todos los ciudadanos que se queden en casa y sólo se les permitirá salir para «tareas esenciales» como viajes a la tienda de comestibles o a la farmacia, dijo Macron a la nación el lunes.
El cierre comienza el martes al mediodía. Al mismo tiempo, las fronteras de Francia con el resto del espacio Schengen -gran parte de la UE- también estarán cerradas, anunció el presidente.
«Estamos en guerra», repitió varias veces, señalando que la lucha de Francia no es contra una nación o un ejército, sino contra el «enemigo invisible» del coronavirus covid-19, el contagio que se extiende rápidamente y que asola la UE.
Sin embargo, el cobro de las facturas de servicios públicos – gas, electricidad, agua y alquiler – también se suspenderá mientras dure, ya que el Palacio del Elíseo trató de atenuar las dificultades impuestas a Francia.
Francia ha registrado al menos 6.633 casos de covid-19 hasta el lunes, con 148 muertes. Macron admitió que no sabía por cuánto tiempo se mantendrá la situación actual.