Un estudio preliminar de los pacientes de COVID-19 en China sugiere que los que tienen el tipo de sangre A pueden ser más vulnerables a la infección que las personas de otros tipos de sangre.
En el estudio, los investigadores médicos analizaron los grupos sanguíneos de más de 2.000 pacientes infectados con el coronavirus en las ciudades de Wuhan y Shenzhen. Hallaron que los pacientes de tipo A tenían mayores índices de infección y por lo general presentaban síntomas más graves.
Aunque los resultados del estudio son aún preliminares y es necesario realizar análisis adicionales para determinar si existe una relación científica entre la infección y el tipo de sangre, los investigadores han pedido a los gobiernos y a las instalaciones médicas que tengan en cuenta las diferencias en el tipo de sangre cuando traten a los pacientes y planifiquen cómo detener la propagación del virus.
«Las personas del grupo sanguíneo A podrían necesitar una protección personal particularmente reforzada para reducir la posibilidad de infección», escribieron los investigadores, dirigidos por Wang Xinghuan en el Centro de Medicina Basada en la Evidencia y Traslacional del Hospital Zhongnan de la Universidad de Wuhan, según informó el South China Morning Post.
«Los pacientes infectados por el virus Sars-CoV-2 [COVID-19] con el grupo sanguíneo A podrían necesitar una vigilancia más atenta y un tratamiento más agresivo», escribió Wang.
Los investigadores también hallaron que los que tenían sangre del tipo O tenían un «riesgo significativamente menor de la enfermedad infecciosa en comparación con los grupos sanguíneos no O».
«Podría ser útil introducir la tipificación sanguínea ABO tanto en los pacientes como en el personal médico como parte rutinaria de la gestión de Sars-CoV-2 y otras infecciones por coronavirus, para ayudar a definir las opciones de gestión y evaluar los niveles de exposición al riesgo de las personas», añadió Wang.
Según Gao Yingdai, un investigador del Laboratorio Estatal Clave de Hematología Experimental de Tianjin que no participó en el estudio, éste podría mejorarse si se examinara una muestra mucho mayor de pacientes. Además, Gao señaló que el estudio no incluía información sobre las interacciones moleculares entre COVID-19 y diversos tipos de glóbulos rojos, lo que podría explicar la forma en que el tipo de sangre afecta a la probabilidad y la gravedad de la infección. Los tipos de sangre se determinan mediante antígenos en la superficie de los glóbulos rojos. Los antígenos son sustancias que inducen una respuesta inmunológica en el cuerpo.
Gao también advirtió que aunque el nuevo estudio puede ser «útil para los profesionales de la medicina», los ciudadanos «no deberían tomarse las estadísticas demasiado en serio».
«Si eres tipo A, no hay necesidad de entrar en pánico. No significa que estarás infectado al 100%. Si eres del tipo O, tampoco significa que estés absolutamente seguro. Aún así, debes lavarte las manos y seguir las directrices emitidas por las autoridades», señaló Gao.
