Los EE.UU. han roto su récord de un día de muertes de Covid-19, contando unas 865 muertes sólo el martes, ya que la enfermedad mortal se extiende rápidamente en los principales puntos calientes de todo el país.
Contando más de 188.000 casos confirmados en todo el país, el principal epicentro mundial de Covid-19 ha logrado otro hito sombrío, con datos recogidos por la Universidad Johns Hopkins que muestran que los EE.UU. rompieron su propio récord de número de muertes registradas en un solo día. Las 865 nuevas muertes hacen que el total de muertes en los EE.UU. sea de 3.873, superando con creces a China, donde el brote de coronavirus se originó el pasado mes de diciembre.
Aunque tanto los casos como las muertes van en aumento en los Estados Unidos -en particular en Nueva York, donde se ha registrado casi la mitad de las muertes del país- el brote aún no ha alcanzado su punto máximo. Un modelo creado por el Instituto de Métrica y Evaluación de la Salud de la Universidad de Washington predijo un fuerte aumento de las muertes en las próximas semanas, sugiriendo que el brote alcanzaría su punto álgido a mediados de abril, momento en el que el país podría ver más de 2.200 muertes por día.
Durante una sesión informativa diaria el martes, el grupo de trabajo de la Casa Blanca sobre el coronavirus proyectó que hasta 240.000 pacientes podrían sucumbir a la enfermedad en el mejor de los casos, con un experto de alto nivel en el equipo, el Dr. Anthony Fauci, advirtiendo a los estadounidenses que se preparen para un número de muertes de seis cifras. Mientras que Fauci dijo que esperaba que los esfuerzos de contención agresiva redujeran ese número, incluso los modelos más optimistas sugieren que lo peor está por venir.
Italia todavía lidera el mundo en muertes por coronavirus con más de 12.000, y se enfrenta a una de las tasas de mortalidad más altas con más del 11 por ciento, aunque los expertos en salud han señalado que el número real de infecciones en el país probablemente excede con creces las confirmadas por las pruebas, lo que sugiere que la tasa de mortalidad es mucho más baja. La nación mediterránea ocupa el segundo lugar en cuanto a casos, detrás de los Estados Unidos, con más de 105.000.