El Centro Sismológico Europeo del Mediterráneo (EMSC) informó el lunes por la tarde que un terremoto de magnitud 5.3 había golpeado al país centroamericano de Costa Rica.
Según el EMSC, el epicentro del terremoto se encontraba a 70 kilómetros al suroeste de la capital de San José, bajo la costa del Pacífico del país a una profundidad de 30 kilómetros. Inicialmente fue reportado como un terremoto de magnitud 6.0, pero luego fue revisado a la baja por el EMSC.
Según los testimonios de la página web del EMSC, el terremoto se sintió hasta Boquette, Panamá, a 262 kilómetros al este del epicentro. Un testigo en Colón, en las afueras de la capital, lo describió como «muy fuerte y largo», y otra persona en Quepos, 53 kilómetros al sureste, describió un temblor menor, seguido de una «fuerte sacudida» que luego se desvaneció, en el transcurso de unos 20 segundos.
Costa Rica es propensa a los terremotos ya que está situada a lo largo del llamado «Borde de Fuego del Pacífico», llamado así por su notoria actividad geológica, y cerca de la intersección de cuatro grandes placas tectónicas, la Placa del Caribe, la Placa Sudamericana, la Placa del Coco y la Placa de Nazca