Los voluntarios han rescatado a miles de tortugas marinas aturdidas por el frío en las costas del estado de Texas, mientras la mortífera ola de frío que azota la región sigue provocando cortes de electricidad y escasez de agua.
Unas 4.700 tortugas marinas han sido llevadas a un centro de convenciones en South Padre Island desde el lunes, después de que las criaturas, no acostumbradas a la drástica bajada de temperaturas, llegaran a la orilla.
Wendy Knight, directora ejecutiva del centro de investigación y conservación Sea Turtle Inc. calificó el volumen de tortugas en peligro como «un acontecimiento sin precedentes».
Dijo a la agencia de noticias Reuters que en una temporada de invierno normal sólo llegan a la costa entre 100 y 500 tortugas marinas.
Ed Caum, director ejecutivo de la Oficina de Convenciones y Visitantes de South Padre Island, dijo a Associated Press que no estaba claro cuánto tiempo tendrían que permanecer las tortugas en el centro de convenciones, ya que otro frente frío que se aproxima significa que podrían pasar días antes de que las temperaturas sean lo suficientemente cálidas como para devolverlas.
«Estamos tratando de hacer lo mejor que podemos para salvar el mayor número de tortugas posible», dijo, añadiendo que la energía había sido restaurada en el centro de convenciones el miércoles.
Un vídeo publicado por Caum mostraba a los voluntarios descargando tortugas de los camiones en carros, y miles de tortugas llenando casi todo el espacio del centro de convenciones.
Los voluntarios de South Padre no fueron los únicos en rescatar tortugas del frío.
El miércoles, la oficina del guardabosques de Texas tuiteó que había rescatado 141 tortugas del canal de navegación de Brownsville y de las «bahías circundantes» en el extremo sur del estado, en el condado de Cameron
Las tormentas invernales que azotan el Medio Oeste, Texas y algunas zonas del sur dejaron el miércoles sin electricidad a casi 3,4 millones de residentes en todo Estados Unidos.
En Texas, unos 7 millones de personas, una cuarta parte de la población del estado, han recibido la orden de hervir el agua o dejar de usarla por completo, mientras los propietarios de viviendas, hospitales y empresas se enfrentan a la rotura de las tuberías.
Los críticos han denunciado la pérdida generalizada de electricidad en Texas, atribuyéndola a la desregulación desenfrenada que ha permitido a las compañías eléctricas salirse con la suya al no prepararse adecuadamente para los eventos de clima frío.
La ola de frío ha causado la muerte de al menos 21 personas.
FUENTE : AL JAZEERA Y AGENCIAS DE NOTICIAS
