(Imagen de portada Un lanzador de misiles Patriot Advanced Capability en Taiwán. (FILE PHOTO) © Reuters / Richard Chung TW)
Taiwán declaró que ya está produciendo en masa un misil de largo alcance capaz de alcanzar la profundidad de China y que está desarrollando activamente otros tres modelos, siendo el programa de misiles considerado «una prioridad» por Taipei.
En su intervención en el Parlamento el jueves, el ministro de Defensa, Chiu Kuo-cheng, dijo que la investigación y el desarrollo de misiles «nunca se han detenido».
«Esperamos que sea de largo alcance, preciso y móvil», dijo. El programa de misiles está siendo desarrollado por el Instituto Nacional de Ciencia y Tecnología Chung-Shan de Taiwán. A principios de este mes, realizó una serie de seis pruebas de misiles coincidiendo con los ejercicios militares de un mes del Ejército Popular de Liberación de China en el Estrecho de Taiwán.
China reclama Taiwán como su propio territorio, considerando al gobierno de Taipei como una provincia escindida, y ha intensificado la actividad militar para respaldar sus reclamaciones. Las defensas aéreas de Taiwán son puestas a prueba regularmente por los sobrevuelos militares chinos.
Leng Chin-hsu, director del instituto Chung-Shan, dijo a los legisladores taiwaneses que un misil terrestre de largo alcance ya había entrado en producción, y que otros tres misiles de largo alcance también estaban en desarrollo. No dio detalles sobre el alcance del misil, diciendo que «no era conveniente» hacerlo.
Los funcionarios de Pekín no reaccionaron inmediatamente al anuncio de Taiwán. Sin embargo, China advirtió a finales de enero que «los elementos independentistas de Taiwán que jueguen con fuego se quemarán», y añadió que «la independencia de Taiwán significa la guerra».
Desde que llegó al poder en 2016 en Taipéi, la presidenta Tsai Ing-wen abogó por una «disuasión asimétrica»: utilizar equipos móviles difíciles de localizar y destruir, pero capaces de golpear en los 180 km del estrecho de Taiwán y más allá. La mayor parte del equipamiento militar de Taiwán es suministrado por Estados Unidos.
A principios de este mes, el almirante de la marina estadounidense Philip Davidson sugirió que China podría invadir Taiwán en los próximos seis años, una afirmación que Pekín rechazó, diciendo que el almirante estaba exagerando la amenaza de una invasión para inflar el gasto en defensa de Washington.