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El caza ruso MiG-31 interceptó el avión de reconocimiento de la Real Fuerza Aérea de Noruega que se acercaba a la frontera rusa sobre el mar de Barents, que finalmente dio la vuelta, informó el miércoles el Centro de Control de Defensa Nacional (CCND) del Ministerio de Defensa ruso.
«El 7 de abril, el control del espacio aéreo ruso detectó un objetivo aéreo sobre el territorio de Noruega que se acercaba a la frontera rusa. Para identificar el objetivo aéreo y evitar las violaciones de la frontera, se envió un caza MiG-31 de las fuerzas de defensa aérea de la Flota del Norte», comunicado.
La tripulación rusa identificó el objetivo como un avión de reconocimiento radiotécnico y de guerra electrónica Falcon-20 de la Real Fuerza Aérea Noruega y lo escoltó sobre el Mar de Barents.
Después de que la aeronave extranjera se alejara de la frontera, el MiG-31 regresó sano y salvo al aeródromo de origen. El vuelo del caza ruso se llevó a cabo respetando estrictamente las normas internacionales.
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