Los incendios forestales se propagan a través de áreas protegidas en Bolivia.
Los incendios continúan propagándose en el este de Bolivia, dejando grandes áreas de bosque cubiertas de cenizas y humo. Varias reservas naturales protegidas están siendo afectadas
Yovenka Rosado, jefe de la Unidad de Incendios Forestales de Santa Cruz, dijo: «Nuestros bomberos están trabajando en coordinación con militares de las fuerzas armadas, personal técnico de la municipalidad, guardaparques de las distintas áreas protegidas».
En todo el territorio boliviano, hasta finales de julio, se han quemado más de 749.000 hectáreas, un 62% más que en el mismo periodo de 2020, según la Fundación Amigos de la Naturaleza.
Los incendios son provocados con frecuencia por agricultores y ganaderos para aumentar sus rendimientos, pero debido a las condiciones muy secas y al viento pierden rápidamente el control de las llamas.
En la región se han registrado fuertes vientos que, según los ecologistas, han contribuido a agravar las últimas llamas.