La preocupación por el volcán de La Palma aumenta tras un terremoto de 4,3 grados, el más fuerte desde el inicio de la erupción, y los expertos también están alarmados por la aparición de una nueva corriente de lava mortal.
El último temblor , se registró a las 12.17 hora local en Mazo, a una profundidad de 35 kilómetros. Un segundo temblor de 3,8 se registró aproximadamente a la misma profundidad, y un tercero de 3,4 se registró en Fuencaliente a 12 kilómetros de profundidad.
Además, los científicos están vigilando una corriente de lava que se desprendió del flujo principal hacia el mar, tomando una nueva dirección, paralela a la actual, en la zona de El Charcón.
La corriente se abre paso por una zona de la isla de La Palma dedicada al cultivo de plátanos.