El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, ha advertido que el conflicto en Ucrania corre el riesgo de convertirse en una tercera guerra mundial y que la OTAN está participando «en esencia» en una guerra por delegación con Moscú al suministrar armas a Kiev.
En una amplia entrevista emitida el lunes por la televisión estatal, Lavrov dijo que no debe subestimarse el riesgo de un conflicto nuclear y que el núcleo de cualquier acuerdo para poner fin al conflicto en Ucrania dependería en gran medida de la situación militar sobre el terreno.
La entrevista se emitió horas después de que el Secretario de Estado estadounidense Antony Blinken y el Secretario de Defensa Lloyd Austin visitaran Kiev y prometieran más ayuda militar a Ucrania. Austin dijo que Estados Unidos quería ver a Rusia «debilitada» y se comprometió a armar a Ucrania para ayudarla a ganar contra Moscú.
Estados Unidos también tiene previsto acoger esta semana una reunión de más de 40 países para mantener conversaciones sobre defensa relacionadas con Ucrania, que se centrarán en el suministro de más armas.