El ejército ruso ha dicho que ha desplegado aviones de guerra armados con misiles hipersónicos de última generación en la región de Kaliningrado del país, muy cerca de los Estados miembros de la Unión Europea y de los activos de la OTAN.
El Ministerio de Defensa de Rusia dijo que tres cazas MiG-31 con misiles hipersónicos Kinzhal llegaron a la base aérea de Chkalovsk como parte de las «medidas adicionales de disuasión estratégica» y serán puestos en «servicio de combate las 24 horas del día».
Un vídeo publicado por el ministerio el jueves mostraba a los cazas llegando a la base pero sin llevar los misiles, que aparentemente fueron entregados por separado.
El despliegue de los misiles Kinzhal se produce en medio de las crecientes tensiones con Occidente por la actual invasión rusa de Ucrania, que se acerca al sexto mes.
El exclave ruso situado entre Polonia y Lituania, en la costa del Báltico, ha estado a la vanguardia de los esfuerzos de Moscú para contrarrestar lo que calificó de políticas hostiles de la OTAN.
Moscú ha criticado duramente los envíos de armas occidentales a Ucrania, acusando a Estados Unidos y sus aliados de alimentar el conflicto