Corea del Norte ha llevado a cabo pruebas con misiles de crucero estratégicos como una demostración de su capacidad nuclear de «contraataque», según informó el viernes la agencia estatal de noticias KCNA.
De acuerdo con el informe, los misiles recorrieron 1.587 kilómetros siguiendo una trayectoria ovalada y tardaron aproximadamente 2,2 horas en alcanzar sus objetivos. Este lanzamiento marca el cuarto ensayo de misiles del año y el segundo desde que Donald Trump asumió la presidencia de Estados Unidos.
La prueba tuvo como objetivo advertir a «los enemigos que están socavando gravemente la seguridad de la República Popular Democrática de Corea y alimentando un clima de confrontación». Asimismo, sirvió para demostrar «la preparación de sus diferentes medios de operación nuclear», según KCNA. Kim Jong-un expresó su satisfacción con el ejercicio y enfatizó la necesidad de que el ejército mantenga un estado de máxima preparación para el despliegue de armas nucleares.
El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur confirmó que monitoreó el lanzamiento y aseguró que está listo para responder a cualquier «provocación» con el respaldo de Estados Unidos.
En diciembre, Kim reafirmó su compromiso de fortalecer la defensa del país y adoptar una postura más agresiva contra Washington, al que describió como «el Estado más reaccionario», con el fin de garantizar la seguridad a largo plazo de Pyongyang.