Una avalancha ocurrida en Uttarakhand, al norte de la India, dejó un saldo de ocho víctimas mortales, y el último cuerpo fue recuperado el domingo por los equipos de rescate, según reportó el Ejército indio. La operación de rescate, que se extendió por tres días, enfrentó dificultades debido a la altitud del lugar, a unos 3.200 metros, y a las condiciones climáticas extremas.
El desastre ocurrió el viernes por la mañana, cuando la avalancha afectó un campamento de la Organización de Carreteras Fronterizas (BRO), encargada de la construcción y mantenimiento de rutas en las zonas limítrofes del país, cerca de la frontera con China. Al final del viernes, se habían rescatado a 33 trabajadores, aunque las labores tuvieron que suspenderse debido a la lluvia y la nieve que cayeron durante la noche.
Las condiciones mejoraron el sábado, permitiendo que los equipos de rescate reanudaran las labores y salvaran a otras 17 personas. Sin embargo, cuatro de los rescatados fallecieron a causa de las heridas. Kamlesh Kamal, portavoz de la Policía Fronteriza Indo-Tibetana, explicó que las operaciones fueron lentas debido a las intensas nevadas, lo que dificultó el acceso al área afectada.