En un inesperado cambio de discurso, Bill Gates aseguró que el cambio climático “no conducirá a la desaparición de la humanidad”. El magnate, que ha invertido miles de millones en iniciativas ambientales, sostiene que los líderes mundiales deberían enfocarse en otros riesgos más inmediatos.
Según científicos, el futuro de la humanidad podría verse amenazado por peligros creados por nosotros mismos: armas nucleares, inteligencia artificial fuera de control o biotecnología mal utilizada.
El Dr. Rhys Crilley, experto en relaciones internacionales de la Universidad de Glasgow, advierte:
“El cambio climático es una crisis lenta, pero una guerra nuclear podría acabar con la civilización en cuestión de horas.”
Los investigadores temen que incluso un conflicto “limitado” con unas 100 ojivas nucleares podría colapsar el sistema alimentario mundial y provocar la muerte de 2.000 millones de personas en solo dos años.
Mientras tanto, el auge de la biotecnología y la IA ha hecho más fácil que nunca crear patógenos modificados. Un accidente o ataque biológico podría desencadenar una pandemia sin precedentes.
“Prevenir una guerra nuclear y controlar la biotecnología deberían ser prioridades globales urgentes”, concluye Crilley.