Una galaxia cercana está a punto de estrellarse contra la Vía Láctea y el «evento catastrófico» podría desorganizar nuestro sistema solar, según sorprendentes cálculos científicos.
Astrofísicos de la Universidad de Durham llevaron a cabo una simulación por computadora para averiguar más sobre el movimiento de la Gran Nube de Magallanes (LMC), una galaxia satélite que orbita la Vía Láctea.
Lo que encontraron fue asombroso. Resulta que el LMC está dispuesto a chocar directamente contra nuestra galaxia.
A pesar de que la galaxia está a 63.000 años luz de la Vía Láctea y actualmente se aleja de nosotros a un ritmo de 250 millas por segundo, está preparada para eventualmente disminuir su velocidad y regresar hacia nosotros.
La colisión sacudirá toda la Vía Láctea y, aunque puede que no afecte directamente a nuestro Sistema Solar, el investigador principal, el Dr. Marius Cautun, advierte que la colisión podría «sacarnos de la Vía Láctea y llevarnos al espacio».
La colisión hará que las estrellas se muevan y aumentará el riesgo de que las estrellas se desplacen hacia nuevos tirones gravitacionales, lo que podría cambiar la órbita de los planetas. Si hay una pequeña variación en la distancia entre la Tierra y nuestro Sol, esto podría movernos de la «zona Ricitos de Oro» y hacer que el planeta sea demasiado caliente o demasiado frío para que la vida sobreviva.
Pero que no cunda el pánico todavía! Afortunadamente, esta colisión intergaláctica no se producirá hasta dentro de 2.500 millones de años.
Por el lado positivo, los científicos dicen que este espeluznante evento en realidad «restauraría la[Vía Láctea] a la normalidad». La Vía Láctea es una galaxia bastante inusual, con un pequeño agujero negro y muchas menos estrellas en su halo que otras galaxias.
na vez que la LMC se estrelle contra ella, «el agujero negro supermasivo central aumentará su masa hasta en un factor de 8», explica el equipo.
«El halo estelar galáctico sufrirá una transformación igual de impresionante, siendo 5 veces más masivo.»