La luna de Neptuno Naiad emplea algunos movimientos coreográficos ingeniosos para evitar chocar con su cercano compañero Thalassa mientras la pareja orbita de cerca al gigante de hielo, según muestra una nueva investigación de la NASA.
Dos de las 14 lunas confirmadas de Neptuno, Thalassa y Naiad, tienen sólo 100 km de ancho. Los diminutos objetos en forma de Tic-Tac orbitan a sólo 1.150 millas (1.850 km) de distancia, pero nunca chocan. Esto sucede porque, a diferencia de nuestra Luna, que simplemente da vueltas alrededor de la Tierra, Naiad gira alrededor de Neptuno en un patrón en zigzag, perfectamente sincronizado para evitar chocar con su «compañero» Thalassa, explicó la NASA. Los expertos han llamado a esta loca coreografía una «danza de la evasión».
«Hay muchos tipos diferentes de’danzas’ que los planetas, lunas y asteroides pueden seguir, pero esta nunca antes vista», dijo Marina Brozovic, investigadora del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la agencia espacial. Brozovic notó que Naiad probablemente fue «pateada» en su órbita inusual por una «interacción» anterior con una de las otras lunas de Neptuno, después de lo cual se encerró en una danza perpetua con Talassa.