(Imagen de portada Foto: Centro de Predicción del Clima Espacial (SWPC).
Los expertos en meteorología espacial advierten que una tormenta solar podría golpear la Tierra esta semana – podría significar la interrupción de los sistemas de generación eléctrica, la red eléctrica, las comunicaciones por satélite y las señales de radio.
Según la física de clima espacial, Dra. Tamitha Skov, el sol mantiene nuestra atención esta semana con múltiples regiones brillantes que se queman y lanzan tormentas solares.
Las predicciones de la NASA y la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) muestran que se espera que la tormenta solar impacte en la Tierra para el jueves al mediodía. La tormenta es causada por una eyección de masa coronal (CME).
Según la NASA, las tormentas solares son una variedad de erupciones de masa y energía de la superficie del sol.
Bengalas, prominencias, manchas solares y eyecciones de masa coronal son los presagios comunes de la actividad solar. Todas ellas implican liberaciones repentinas de energía magnética almacenada, que aceleran los gases calientes cerca de la superficie o en la corona del sol.
A veces, estas partículas llegan hasta la Tierra y más allá. Cuando el material colisiona con el campo magnético de la Tierra y los cinturones de radiación atrapados, puede arrojar partículas a nuestra atmósfera superior para causar la Aurora, según la NASA.
La Aurora, a veces llamada luces polares, luces del norte o luces del sur, es un despliegue de luz natural en el cielo de la Tierra. Skov dijo que la próxima tormenta solar podría llevar la Aurora a lugares como Maine, Minnesota y Washington.
Las mismas partículas «cargadas», explicó la NASA, pueden producir sus propios campos magnéticos, que pueden modificar el campo magnético de la Tierra y afectar las lecturas de la brújula, inducir electricidad en largas tuberías, o producir picos de electricidad en las redes eléctricas que provoquen caídas de tensión y apagones.
Skov añadió que la propagación de la radio y la recepción del GPS se verán afectadas una vez que la tormenta solar llegue el jueves.
Los meteorólogos espaciales de la NOAA y la NASA analizan el clima espacial utilizando observaciones terrestres y espaciales en tiempo casi real para evaluar el estado actual del entorno geofísico solar, que va del sol a la Tierra y los puntos intermedios. Los pronosticadores también analizan el patrón recurrente de 27 días de actividad solar.
Basándose en un análisis exhaustivo de las condiciones actuales, comparándolas con situaciones pasadas, y utilizando modelos numéricos similares a los modelos meteorológicos, los pronosticadores pueden predecir el clima espacial en escalas temporales de horas a semanas.
La NOAA explicó que es importante pronosticar el clima espacial porque sus efectos en los sistemas de la Tierra incluyen interferencias en la propagación de las ondas de radio cortas, problemas con la red eléctrica, el decaimiento de las órbitas de los satélites y el peligro de radiación para los satélites y los astronautas durante algunas fases de las misiones espaciales.