Un equipo de científicos australianos ha identificado el cráter de impacto de meteorito más antiguo conocido, con una antigüedad de 3.500 millones de años.
El hallazgo, realizado en una remota región de Australia Occidental, podría cambiar nuestra comprensión sobre los orígenes de la vida en la Tierra. Este cráter, que supera en antigüedad al anterior más antiguo encontrado en Australia, de 2.200 millones de años, proporciona una nueva pieza clave en el estudio de los impactos en la Tierra.
Los investigadores de la Universidad de Curtin han revelado que el cráter tiene más de 100 kilómetros de ancho y se formó por el impacto de un meteorito que viajaba a más de 36.000 km/h. Según el profesor Tim Johnson, este descubrimiento sugiere que podrían existir más cráteres antiguos por descubrir. Los científicos creen que los impactos de meteoritos podrían haber creado entornos favorables para la vida microbiana, lo que podría arrojar luz sobre el inicio de la vida en nuestro planeta.
Estudio publicado revista Nature Communications