Un nuevo estudio de la Universidad de Binghamton (EE.UU.) advierte que las rutas migratorias de numerosas especies de aves están colapsando, lo que podría desencadenar efectos devastadores para sus poblaciones y los ecosistemas que habitan. Los científicos señalan que el cambio climático es la causa principal de esta alteración, ya que modifica los patrones de temperatura, los recursos alimenticios y los refugios naturales.
“Los períodos de migración pueden coincidir con eventos climáticos extremos, que se están volviendo mucho más comunes”, explicó Anne Clark, profesora de ciencias biológicas de la institución. Entre las especies más afectadas figuran el playero rojizo, el zorzal de Swainson y las chipes azules de garganta negra.
El estudio revela que muchas aves han perdido sus “centros de reabastecimiento”, áreas esenciales que utilizaban para descansar y alimentarse durante sus viajes. Sin esos puntos de parada, las aves se ven obligadas a modificar sus rutas o enfrentan la muerte por inanición. “Las áreas que han habitado durante mucho tiempo ya no son adecuadas para sus necesidades”, señaló el ecólogo Justin Mann.
Los expertos advierten que este fenómeno ya no es local, sino global, y mencionan que la prolongación de la temporada de huracanes en el Golfo de México está aumentando el riesgo para las especies migratorias. Si la tendencia continúa, el colapso de las rutas migratorias podría tener consecuencias irreversibles para la biodiversidad y el equilibrio ecológico del planeta.

