La NASA ha confirmado un hallazgo sorprendente: la Tierra tiene una segunda “luna”, un pequeño asteroide bautizado como 2025 PN7, que permanecerá acompañándonos al menos hasta el año 2083.
Aunque se le llama “luna”, en realidad se trata de una cuasi-luna, un tipo de asteroide que comparte una órbita muy similar a la de nuestro planeta alrededor del Sol. Según la agencia espacial, este objeto mide apenas 19 metros de diámetro y ha estado siguiendo a la Tierra desde la década de 1960 sin que nadie lo notara.
El descubrimiento fue realizado por astrónomos del observatorio Pan-STARRS en Hawái y publicado recientemente en Research Notes of the AAS. Los expertos explican que, aunque parezca estar orbitando nuestro planeta, no está gravitacionalmente ligado a él y eventualmente se alejará hacia el espacio.
Carlos de la Fuente Marcos, astrónomo de la Universidad Complutense de Madrid, explicó que estas cuasi-lunas son parte de una familia de objetos conocidos como Arjunas, que se mueven en sincronía con la Tierra. “Estas rocas son pequeñas, difíciles de observar y están llenas de sorpresas”, afirmó.
Entre las cuasi-lunas más conocidas figura Kamo’oalewa, cuya órbita vinculada a la Tierra dura 381 años. Los científicos creen que estas rocas representan un “cinturón de asteroides secundario” que acompaña a nuestro planeta en su viaje alrededor del Sol.

